Mentiras electorales

Sería una estúpida si creyera realmente en todo lo que los políticos nos dicen desde sus púlpitos durante la campaña electoral. Es más, yo que en estas cosas soy muy mía, he decidido desde hace un tiempo no creerme nada. ¡¡A mí me la van a dar con queso!! Ante la duda, prefiero no creerme nada antes de soñar con 400 euros más en la nómina o con trabajo de verdad para mí y todos mis compañeros.

Esa soy yo, desconfiada por naturaleza, pero no todo el mundo es así. De hecho no me cabe duda de que mucha gente vota a un partido porque realmente le han convencido de que lo que dicen es cierto. Y en eso se basa la campaña electoral, en ganarse al electorado mintiéndole pero sin que se note. No importa tanto lo que se dice sino cómo se dice.

Es por ello que me parece vergonzoso que el señor Solbes salte hoy a la palestra para decirnos que los datos económicos que nos dio hace sólo una semana no eran "del todo" verídicos. Según recoge "El Correo", Solbes admite que «Hay que luchar por la estabilidad en el marco del ciclo económico, por lo tanto puede suceder que en un momento determinado incluso podamos tener un déficit(...) De caer el ritmo de crecimiento de un modo intenso, España podría pasar de obtener un superávit, a reflejar un déficit público».

Se agradece la sinceridad, no voy a decir que no, pero hay un dicho popular, que con su permiso voy a citar ya que viene muy bien al caso y, que dice "a buenas horas, mangas verdes". Así es que tras pintarnos un panorama alejado de la crisis económica, nos dice ahora que sí, que la desaceleración ocurrirá y además de eso podemos tener déficit. Y, digo yo, ¿no es eso lo que nos dijo el Sr. Pizarro en el debate que mantuvo con Solbes?

En política, parece ser que más vale mentir que perder. Pero, señores, engañar al electorado nunca ha traído buenas consecuencias así que tal vez deberían ir aplicándose el cuento de que "lo importante es participar" para el año 2012.